En esta ocasión os escribiré sobre esas cosas que dejamos para hacer después…
En esta ocasión. si que es una cosa de la que suelo abusar y debería corregir…
Hay muchas pequeñas cosas, que se hacen casi solo apretando un botón, que suelo ir postergándolas y al final se acumulan convirtiéndose en cosas grandes, por acumulación de faena.
En otras ocasiones, son cosas que no nos gustan y no nos apetece realizarlas (aunque sabemos que las tendremos que realizar nosotros, tarde o temprano), las vamos dejando, para mañana, para pasado, para el otro, hasta que al final nos armamos de valor o necesidad y nos toca realizarlas.
Realmente en estos casos, nos pegamos varios días pensando que tenemos que realizar eso, que al final realizaremos por necesidad.
¿No seria mejor realizarlo cuando tengamos un espacio de tiempo para realizarlo?
Realmente si lo hacemos en la primera ocasión que tengamos disponible, descansaremos y nos olvidaremos del tema, pero si lo vamos dejando, tardamos mas en pensar que tenemos que hacerlo, una y otra vez, que realmente lo que nos cuesta realizar esa cosa que no nos apetece.
Realmente, cuando vamos “aparcando” eso que tenemos que hacer y no hacemos, nos hace sentir mal y nos recuerda constantemente que nos sentiremos mal haciendo eso que tenemos que hacer.
Ciertamente, cuando “aparcamos” esa cosa, que tenemos que hacer porque no nos apetece hacerla, deberíamos ponernos las pilas, realizar el trabajo y después descansar del tema.
Algunos “aparcan” esos trabajos que no desean realizar por los siguientes motivos:
-Quizás dejando de hacerlo escurra el bulto y no tenga que realizarlo yo.
-Con suerte lo realiza otra persona y me libro de hacerlo.
-Igual se hace solo y no lo hago yo.
La realidad es bien distinta, cuando descubres que nadie hará por ti lo que tu tienes que hacer, tendrás que correr y hacerlo a toda prisa porque si no hay obligación, como no te apetece hacerlo, simplemente lo “aparcas”.
Entonces, cuando tenemos que realizar algo que no nos apetece realizar, lo mejor es encogerse de hombros, asimilarlo, realizarlo, sin prisas, pero sin pausa, solo así olvidaremos el tema una vez realizado y realmente estaremos mas felices, si en “grano” de ese trabajo que sabemos que tendremos que realizar, que no nos apetece realizar, pero que terminaremos realizándolo.