Ser un zombi tiene su lado bueno. Permaneces en un perenne estado de embotamiento muy cercano a la felicidad, te quitas quebraderos de cabeza -ni siquiera el desmembramiento progresivo te preocupa-, luces una pinta llamativa sin gastar en moda ni en cosméticos, puedes comer de todo, no estás obligado a trabajar y, por si esto fuera poco, un montón de góticos te dedican bellas canciones. Desde luego, puesto a ser un freak con olor a humedad, mejor convertirse directamente en muerto viviente y bailar ‘Thriller’ por las calles. La ocasión ideal llega este sábado con la celebración en Madrid del primer Día del Orgullo Zombi, organizado por LKM-La Casa del Maquillaje, la Asociación Nacional y Comunitaria de Estatuas Vivientes y Teatro -me encanta este nombre- y Abandomoviez. Según explican, la iniciativa tiene ya gran tradición en San Francisco (la ciudad de EE UU, no el barrio de Bilbao) y conmemora el nacimiento de George A. Romero, el de ‘La noche de los muertos vivientes’. Todas las personas que acudan a la Plaza Dalí serán bellamente maquilladas de cadáver pútrido para participar después en el desfile. «No se descarta que los zombis hagan un alto en el camino para tomar algún refrigerio e incluso, aprovechando las rebajas, ir de compras a la calle Preciados», pronostican los responsables.
Pueden practicar en casa escuchando este ‘Now I’m Feeling Zombified’ de Alien Sex Fiend, un tema capaz de animar hasta la morgue más fría.