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César Coca

Divergencias

Los nombres de las calles

Me gustan los nombres de las calles de los cascos históricos de las ciudades que se refieren a los oficios o las actividades que allí se desarrollaban: Bordadores, Libreros, Mercado, Notarios, Universidad, Curtidores, etc. Me gustan también los que homenajean a grandes personalidades de valor indiscutible, lo mismo científicos que escritores, músicos, inventores, artistas, descubridores… Y me resultan atractivos los que recogen características de la vía o viejas leyendas sobre lo que allí sucedía. Recuerdo calles como Amargura (maravilloso nombre), o Bientocadas (no quiero ni pensar a qué se debe) o Pez Volador.

Y desde luego si hay algo que no entiendo es que se cambien periódicamente los nombres de esas vías. Cuando no se premia al político de turno o al militar que sentó aquí sus reales, no hay por qué modificar la denominación con cada nuevo Gobierno o nuevo régimen. Por eso tampoco me parece mal lo que han hecho en lugares como Nueva York: números para las calles y las avenidas. Tiene la ventaja de que cualquiera sabe dónde se encuentra algo simplemente por el nombre de la calle. Creo recordar que también hay sitios, como Ciudad de México, donde la cosa va por distritos: hay uno en el que las calles tienen nombre de ríos, otros en los que son capitales europeas, y así.

Todo este largo preámbulo viene porque me acabo de enterar de que van a cambiar unos cuantos nombres de calles en Cuenca. ¿Y qué nuevas denominaciones les van a poner? Aquí van: José Luis Perales, Mari Carmen Martínez (¿le pondrán otra calle a doña Rogelia?), José Luis Coll, Gustavo Torner y Antonio Saura, entre otros. Qué quieren que les diga. No sé si todos me gustan, al margen de que allá los conquenses para poner a sus calles los nombres que les vengan en gana. Pero tengo la impresión de que la calle Mari Carmen Martínez se presta a todo tipo de chistes y que en la calle José Luis Perales algún gracioso, ahora que se llevan los establecimientos de nombre largo, abrirá pronto un bar que se llame A qué dedicas tu tiempo libre. Ah, y hablando de nombres largos, una de las calles ha sido rebautizada como Veteranos de las Fuerzas Armadas Españolas. Imagino que en cuatro días todo el mundo la conocerá como calle Veteranos y el homenaje habrá perdido todo su sentido. Pero así son las cosas.

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