Hace días que tenemos olvidado el folleto de Claudia
Bermúdez, “Depresión: Control y superación”.
Aunque hace unos meses os publique un post titulado, “Depresión”,
hoy volveremos a repetir el tema.
Como es habitual empezare por reproduciros su definición.
La depresión es un
problema emocional muy grave en el cual el individuo no deja de sentirse triste
y vacío, y constantemente se siente sin ayuda o esperanza.
Las personas
deprimidas usualmente sufren de ansiedad e irritabilidad, una falta de
motivación, y una pérdida de placer en las cosas que antes le gustaba hacer.
También tienen
problemas con el apetito, el sueño, y sufren de dolores.
Muchas personas
deprimidas tienen pensamientos suicidas y un 10-15% terminan por quitarse la
vida.
La depresión es una enfermedad que progresa cada día, suele
afectar al 5% de la población y es mucho mas frecuente que se deprima la mujer
que el hombre.
La depresión puede ser a causa de herencia genética, de
algunas enfermedades, producida por ciertos medicamentos, por el uso de drogas
y alcohol y por problemas mentales.
Los síntomas de la depresión hacen perder el interés al
paciente por sus hobbies, este sentirse triste sin motivo aparente, sentimiento
de cansancio o estar inquieto, no valorarse personalmente o sentimientos de
culpabilidad, puede variarle el apetito y el peso, pensar en la muerte o el
suicidio, no poder concentrarse o tener dificultad para tomar decisiones, no
poder dormir o dormir demasiado, dolores de cabeza, dolores generalizados en
todo el cuerpo, problemas de estomago, sexuales, pesimismo, estar ansioso o
preocupado, etc.
El tratamiento contra la depresión debe realizarse con
medicamentos antidepresivos, con psicoterapia o con ambas cosas.
También el apoyo de la familia y el círculo de personas que
rodean al paciente es fundamental para la recuperación del enfermo.
Para evitar la depresión deberíamos procurar dormir bien,
evitando el estrés, una alimentación adecuada (el consumo de omega-3 y folatos,
son útiles preventivos contra esta enfermedad).