El hilo de Ariadna para orientarse en el
laberinto de ETA lo guarda Florencio Domínguez. No se puede escribir
sobre la banda terrorista sin haber leído sus libros. Obras como
‘Dentro de ETA’, ‘ETA en Cataluña’ o ‘La historia de ETA’ -escrita
junto a José María Garmendia y Gurutz Jáuregi y coordinada por Antonio
Elorza-, son indispensables para saber qué es lo que sucede en el País
Vas0co.

Florencio Domínguez tiene la virtud de poner orden en el caos y
construir una narración donde otros sólo acumulan datos. Pero es que,
además, el autor proporciona información que nadie más es capaz de
conseguir. Sus libros permiten acceder en muchas ocasiones a las claves
indispensables para entender el terrorismo de ETA  Es un maestro.

Su último libro: ‘Josu Ternera. Una vida en ETA’,
es perfecto. La  idea no puede ser más sencilla y, a la vez, más
eficaz. Contar la historia de José Antonio Urrutikoetxea, ‘Josu
Ternera’, es contar la historia de la organización desde sus orígenes,
durante el franquismo y los años de la ‘guerra sucia’, hasta su actual
situación de tregua. Florencio desmenuza al personaje y propociona
puntos de vista que nadie más es capaz de ver.

En el actual contexto, la lectura del libro proporciona un dato que
resulta inquietante. ‘Ternera’, que ha estado dirigiendo todos los
procesos de negociación de ETA desde los años 80, nunca ha conseguido
que fructifique la paz. Según cuenta Domínguez, su estrategia
negociadora siempre ha consistido en exigir que el Gobierno discuta los
plazos de aplicación de sus reclamaciones, nunca los contenidos.

Pero además, la obra tiene ese tipo de párrafos que uno debe mirar dos
veces porque la primera vez uno no se cree lo que está  leyendo.
Por ejemplo, se recoge la información, incautada a la propia ETA, sobre
los topos que la banda tenía dentro del PNV y EA en anteriores procesos
negociadores (Y se detalla lo que cobraban). Y también se recogen las
traiciones de la propia organización que llevaron a la cárcel a
Urrutikoetxea. Es ese tipo de lectura que hace pensar que nada es lo
que parece.

Hay un detalle que me parece interesante, aunque quizás sólo sea
anecdótico. Florencio Domínguez detalla la afición a la gastronomía de
‘Ternera’; describe con pelos y señales cómo es la cocina que consigue
instalarse en la cárcel francesa de Fresnes y revela sus hábitos
culinarios. Al leerlo, surge una pregunta: ¿Cómo puede ser una banda
terrorista en la que la única obra escrita por su principal dirigente
no es una tesis política, ni ideológica ni de análisis sino un libro de
recetas de cocina?