Tengo miedo por Isobel Campbell, la más encantadora habitante del playlist de Concha, que comparte habitualmente con Nick Drake (sobredosis de antidepresivos), Janis Joplin (sobredosis de heroína), Elliott Smith (se suicidó de una puñalada en el pecho), Tim Buckley (sobredosis de heroína y alcohol) y su hijo Jeff Buckley (se ahogó en un río). El folk parece un estilo musical inofensivo, hasta aburrido a veces, pero sus intérpretes llevan el infierno dentro. Menos mal que Isobel representa más bien algo que llaman twee pop, un tipo de indie pop originario del Reino Unido que, nos ilustra la Wikipedia, “es conocido por sus letras y melodías dulces y simples”. Ex chelista y segunda voz de Belle & Sebastian, estandartes de dicho estilo, Isobel publica a finales de mes su cuarto disco en solitario, el segundo bajo su nombre, en colaboración con Mark Lanegan, ex vocalista de Screaming Trees y Queens of the Stone Age. Desde aquí quiero enviar un mensaje de apoyo a la carrera de Isobel Campbell, que no termina de despegar: ¡¡¡explota ya, chavala, que tú vas a ser una estrella!!!