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César Coca

Divergencias

Idea para un cuento sobre la crisis económica

Hace unas semanas, escuchando las noticias en la radio mientras paseaba por una playa del Mediterráneo, se me ocurrió una idea para un cuento. El problema es que cuando voy de vacaciones no me gusta llevar ordenador ni estilográfica, que son mis dos herramientas imprescindibles para escribir, así que no pude darle forma. Han pasado los días y debo confesar que soy de natural perezoso para plasmar proyectos que ya se me antojan antiguos así que me temo que la historia quedará por escribir. Pero, ahora que estoy ya de vuelta, no me resigno a hacerles un resumen del argumento. Al fin y al cabo, creo que la historia les puede sonar, al menos en su arranque.

Escena 1. Flavio Morricone, primer ministro de Italia, está leyendo los periódicos. Todos llevan en portada noticias sobre los ataques al euro, la prima de riesgo, la necesidad de intervención del Banco Central Europeo y nuevas amenazas de rebaja de la calificación de la deuda de algunos países por parte de las conocidas agencias Extra & Rich’s, Cloudy’s y Peach. Entonces, Morricone levanta el teléfono y pide que le pongan con el portavoz de la familia Trapattone, que dirige numerosos negocios de reputación nada dudosa: todo el mundo sabe que son ilegales. “En cuanto puedan, vengan a mi despacho”.

Escena 2. Morricone ha explicado al patriarca de los Trapattone que las agencias de calificación amenazan la economía italiana y la de otros países de Europa. Con tono melifluo le explica que está en peligro el Estado y que muchas personas se arruinarán de seguir las cosas así. “Otros se enriquecerán, y quizá no sean ustedes”. Trapattone pide cosas a cambio de su intervención. Una larga lista que el primer ministro lee con atención. Luego asiente y la conversación se da por terminada.

Escena 3. Un extraño grupo de personas se sube al avión Roma-Nueva York. Parecen músicos porque todos llevan fundas de violín, pero no tienen aspecto de saber leer una partitura.

Escena 4. De forma simultánea, los viajeros, divididos en grupos de tres o cuatro, se entrevistan con los responsables de las agencias de calificación. Asistimos al diálogo de uno de esos grupos con el presidente de Extra & Rich’s: “Venimos a hacerle una propuesta que no podrá rechazar…” Al día siguiente, los periódicos hablan del repentino final de la presión de los especuladores sobre las economías europeas. Nada se sabe, en cambio, de la lista que Trapattone entregó al primer ministro. Pero de algo nos enteraremos, seguro.