Ha muerto José Ángel Ezcurra, fundador y director de Triunfo. Tenía 89 años.
No lo conocía, pero sí su revista, que comenzó tratando temas de cine y en los años sesenta se pasó a la política, acogiendo opiniones diversas pero con un cierto tono podríamos decir filocomunista. Dentro de lo que permitían la censura primero y luego la perenne amenaza de una sanción, por supuesto. Cuando yo estudiaba Periodismo, en la segunda mitad de los setenta, Triunfo había perdido influencia porque competía con otras revistas como Cuadernos para el Diálogo y Cambio 16 y, sobre todo, con diarios que pronto se quedaron con la parte fundamental del mercado de la información: El País, Diario 16 y unos renovados ABC y Ya, que podían decir cosas que antes les estaban vetadas.
La Transición hubiese sido distinta, y creo que peor, sin la labor de los medios de comunicación y sobre todo de ciertos periódicos y revistas que promovieron la concordia y el pacto. Ahora se dice con frecuencia que la Transición no fue perfecta. Por supuesto. Pero sus protagonistas insisten en que fue la única posible y creo que llevan razón. Gentes como Ezcurra, desde una posición discreta, aportaron lo suyo. Justo es reconocerlo.