Territorios, el suplemento cultural de El Correo, publica mañana una noticia que es por lo menos curiosa: en China se va a estrenar un musical cuyo libreto está basado en El Capital, de Marx. Supongo que no tendré oportunidad de verlo, pero me gustaría comprobar cómo se puede transformar en musical la densidad argumental y conceptual de esa obra. Por no hablar de sus descomunales dimensiones, que deberán reducirse a su mínima expresión para encajar en un espectáculo que intuyo que no durará más de dos horas o dos horas y media.

Leí El Capital en mis años de universitario, por obligación académica. No recuerdo la denominación exacta de la asignatura que impartía pero un profesor cuyo nombre sí recuerdo nos puso como materia obligatoria de examen el primer tomo (sabíamos con seguridad que iba a entrar una pregunta de alguno de los temas tratados) y con los otros dos debíamos hacer un trabajo. Aún tengo en la retina la portada color naranja de la edición del Fondo de Cultura Económica, con un retrato de Marx. Creo que la traducción era de Wenceslao Roces. El primer tomo me resultó interesante pero los otros dos se me hicieron insufribles. Jamás, ni en el más surrealista de mis sueños, se me habría ocurrido que se podía hacer un musical con ese libro. ¿Cómo será la partitura?