Esta receta de pastel de gambas, contiene un ingrediente poco utilizado, la lombarda.
La lombarda es como la habitual col, de color roja y un poco más dura de cocción.
Como el otro día se me acumulaban los huevos, que nos ponen las gallinas que tenemos en casita, decidimos consumir un trozo de lombarda que teníamos perdida en los confines de nuestro congelador.
Ingredientes. (6 personas).
¼ lombarda (col roja)
1 pastilla de concentrado de carne
1 pimiento
1 cebolla
6 ajos
3 puñaditos de gambas peladas congeladas
6 huevos
Aceite
Preparación:
En primer lugar troceamos la lombarda y la cocemos alrededor de 30 minutos o hasta que este tierna, en agua, con un chorrito de aceite y la pastilla de concentrado de carne.
Mientras se cuece, troceamos la cebolla, el pimiento, pelándolos y troceamos los ajos.
Freímos la cebolla, el pimiento y el ajo en una sartén muy grande, (después tendremos que meter la col en ella), con un poco de aceite.
Cuando este frito añadimos las gambas sin descongelar y les damos unas vueltas.
Una vez cocida la lombarda, la escurrimos y la agregamos a la sartén, para que se mezclen bien los sabores.
El caldito de cocer la lombarda podemos reservarlo para futuras recetas, en lugar de tirarlo por la fregadera.
Ahora batimos los seis huevos, en un recipiente grande, después tendremos que mezclarlos con el contenido de la sartén, cuidando que antes se nos enfrié, para que no nos cuaje el huevo.
Mientras preparamos un molde y lo cubriremos con papel de hornear para después desmoldarlo con mayor facilidad.
Mezclamos el contenido de la sartén, una vez frio (o por lo menos templado), con los huevos batidos y lo volcamos sobre el molde que hemos preparado con anterioridad.
Lo introducimos en el microondas a máxima potencia en fracciones de unos 10 minutos, hasta que este cuajado.
En mi caso, ha bastado con poner dos veces 10 minutos el microondas, el tiempo de cocción del microondas depende mucho de las cantidades y la potencia del microondas (el mío es poco potente).
Para asegurarse que esta cocido el pastel, en su interior, se puede pinchar el centro del pastel con una brocheta, cuando sale limpia, está bien cocido.