No entiendo muy bien cómo en plena efervescencia del libro electrónico el primer título que mezcla literatura de misterio tradicional con vídeos que completan la trama se edita en papel en vez de optar por la edición digital. Pero lo cierto es que la novedad ya está aquí. Skeleton Creek, de Patrick Carman, plantea una intriga criminal que requiere ver nueve vídeos colgados en una web para cuyo acceso hay que disponer de unas claves que aparecen en el volumen. Se supone que esos vídeos son filmaciones que han hecho los protagonistas durante la investigación (lo edita Bruño)
Los primeros comentarios sobre el texto son positivos, aunque ignoro si se trata de lectores avezados o de simples curiosos deslumbrados por la novedad. En cualquier caso, es evidente que la literatura está explorando nuevas posibilidades y estamos sólo en el inicio de lo que puede venir. Aunque me sorprende la timidez de la editorial al publicarlo en papel. Creo que habría sido mucho más atractivo en versión digital porque además permitiría ver los vídeos sin tener que andar saltando de un soporte a otro. Bienvenida sea la novedad. No habrá que esperar mucho para saber si otros siguen esta tendencia o queda para la historia como un experimento fallido.