La revista colombiana Cambio, que nació a mediados de los noventa como filial de la española Cambio 16, ha cerrado sus puertas. Cambio fue pronto adquirida por un grupo editorial en el que participaba el Nobel García Márquez (quien presidió la revista y publicó en ella un buen puñado de artículos) y más tarde por los editores de El Tiempo, donde tiene una notable presencia el grupo Planeta. La revista se convertirá en mensual pero perderá su carácter de publicación dedicada a la investigación para orientarse hacia el ocio. Todo su personal ha sido despedido.
No he seguido demasiado esa revista, sobre todo desde que García Márquez dejó de publicar en ella, pero tiene buena fama por haber publicado reportajes sobre asuntos de gran interés en su país, destapando más de un escándalo. Por ello me parece muy mala noticia ese cierre. Son malos tiempos para la lírica y para la información de calidad.