Es casi imposible que no la conozcan. Hablo de la banda sonora de la película La vida es bella, escrita por Nivola Piovani, que ganó el Oscar. Una música hermosa (muy superior a la película, bastante tramposilla en la manipulación de los sentimientos del espectador), que se relaciona de inmediato con las melodías tan características del país.

Pues bien, empiezo a estar saturado de esa melodía principal de la banda sonora. La oigo en todas partes: en el anuncio de turismo de Castilla-León y en otros espacios publicitarios de marcas que no recuerdo, y empieza a ser común como fondo sonoro a espacios informativos. Hoy mismo la he escuchado subrayando unas imágenes… de fútbol. Las han emitido en la Sexta, durante el informativo de mediodía, y sonaba mientras daban un breve reportaje sobre el entrenador del Almería. Por más vueltas que le he dado, no he encontrado relación alguna entre la partitura de Piovani y el fútbol.

¿Es que no hay otra música que se hace necesario recurrir siempre a la misma? Conseguirán que terminemos odiándola.

P. S. Por si acaso hay algún lector que no sabe de qué música hablo, se la dejo aquí abajo.