Alfonso del Río vuelve a convertir a Bilbao en personaje relevante de una novela. Tras La ciudad de la lluvia, en El lenguaje oculto de los libros la Villa es, junto a Oxford, el escenario fundamental de la acción. Una acción estructurada básicamente en dos planos temporales: los años treinta y los sesenta del pasado siglo. En este segundo plano es donde arranca la novela, cuando la hija de un conocido empresario y novelista bilbaíno, apellidada De la Sota –no es casualidad, obviamente– encarga a un abogado británico que indague en torno a un posible misterio oculto en el último libro de su padre. Ahí, piensa ella, puede estar la clave para hallar una fortuna que misteriosamente perdió su progenitor en sus últimos meses de vida.
En los años treinta asistimos a esa etapa postrera del padre de la mujer, que transcurre casi toda ella en Oxford, donde mantiene largas conversaciones sobre la literatura y la vida con dos personaje reales que estaban allí en ese momento: J.R.R. Tolkien y C.S. Lewis. También habrá un cameo de Unamuno, que coincidirá en Bilbao con De la Sota.
Alfonso del Río ha elaborado una novela que combina acción y pensamiento. Porque hay asesinatos, persecuciones y engaños. Pero también hay conversaciones pausadas, reflexiones dolorosas a veces y mordaces otras sobre la esencia misma de la vida y la felicidad. La recreación de los dos escritores británicos está muy lograda, como la ambientación en general. Y la trama engancha con lo que es un juego de trampas y secretos.
(Publicado en elcorreo.com)