Villa-Lobos es un compositor cada vez más valorado fuera de América Latina, donde siempre lo ha sido. Investigador del folclore, músico de calle en su juventud, gran contador de historias (con una parte de fabulación no despreciable), capaz de componer en un bar mientras sus amigos charlaban a gritos y reían, fue también promotor cultural, director de orquesta y unas cuantas cosas más a lo largo de una vida fructífera.
Este fin de semana les propongo una de sus Bachianas brasileiras, la Nº 4. De ella existen dos versiones, una para piano y otra para orquesta. La Sinfónica de Bilbao ha tocado ayer y repetirá en su concierto de hoy esta pieza en su versión orquestal. Yo les dejo con la pianística, con un intérprete tan notable como Nelson Freire.
Disfruten.