¿Existe la literatura femenina? | Divergencias - Blog elcorreo.com >

Blogs

César Coca

Divergencias

¿Existe la literatura femenina?

Hoy es 8 de Marzo y parece el día más adecuado para recuperar un debate que reaparece cíclicamente en el mundillo académico, crítico y periodístico: ¿existe la literatura femenina? Me parece que la pregunta requiere de una aclaración previa sobre lo que es eso de literatura femenina.

Porque podríamos hablar sin temor a error de literatura feminista: es la que, en el terreno de la ficción o el de la no-ficción, trata acerca de los grandes problemas de las mujeres, en especial de los surgidos en el terreno de la desigualdad de derechos. Y lo hace además de una forma militante, en defensa clara y combativa de esa igualdad de derechos. Sin embargo, no me parece que sea lo mismo literatura feminista que femenina. La literatura feminista puede interesar lo mismo a hombres que a mujeres, sobre todo si es buena, como sucede con la totalidad de la literatura.

Si entendemos por literatura femenina a un subgénero de novelas de amor o quizá mejor de novelas rosa, estaríamos ante un fenómeno que no está tan lejos de resultar emparentado con lo que también podríamos denominar literatura masculina: ciertas novelas del Oeste, por ejemplo, o literatura de aventuras bélicas. En cualquier caso, el problema mayor no es el de la denominación sino el de que se trata, en la gran mayoría de los casos, de literatura de muy baja calidad. Libros de consumo que en general ni siquiera tienen una buena factura técnica.

¿Qué es entonces la literatura femenina propiamente dicha? ¿Existe? Tengo dudas. Hay quien sugiere -en tono de cierta maldad, lo advierto- que las obras de algunos autores como Javier Marías interesan especialmente a las mujeres. ¿Es eso literatura femenina? Por supuesto que no. También hay quien señala que las mujeres tienen más fácil el dibujo de los personajes femeninos, y que ahí puede estar la diferencia. Y siempre se citan las novelas de las hermanas Brönte o las de Jane Austen para reforzar esa hipótesis. Pero tengo más dudas: las tres mujeres más atractivas e inolvidables, al menos para mí, de la literatura del siglo XIX, el gran siglo de la novela, están creadas por hombres. Son las protagonistas de La Regenta, Ana Karenina y Madame Bovary.

Incluso hoy día hay magníficos personajes femeninos que han salido de la cabeza de hombres, como hay magníficos personajes masculinos creados por mujeres. Voy a plantearles una pregunta: ¿es El lector de Julio Verne, la novela de Almudena Grandes de la que hemos hablade esta misma semana,  diferente de otras tantas novelas escritas por hombres y ambientadas en la misma época? Diferente por supuesto en el sentido de que se note que su autora es una mujer por alguno de esos factores que se atribuyen a la literatura femenina. Sinceramente, creo que no.

Dicho de otra manera. Me parece que hablar de literatura femenina es un error. Como en tantos otros campos, deberíamos hablar de literatura buena y mala. Sin que importe para nada el sexo de quien ha escrito el libro.