Dutilleux es un compositor poco interpretado por aquí. En realidad, no sé si fuera de Francia es muy conocido en ningún otro lugar. Su discografía es abundante pero la mayor parte de ella se centra en un puñadito de obras. Creo que las más comunes en el catálogo son los conciertos para violín y violonchelo y la Sinfonía Nº 1, que es la que les propongo en esta ocasión. La obra, por cierto, que mañana pondrá en los atriles en su concierto de Bilbao (el próximo viernes, en Vitoria) la Euskadiko Orkestra.
La sinfonía fue estrenada en 1951. Parece que entre el público se encontraba Pierre Boulez, el gran pope de la vanguardia musical francesa e incluso europea, y no le gustó nada la obra porque la veía demasiado anclada en el pasado. Es cierto que Dutilleux echa mano de la tradición, pero eso no significa que su música renuncie a la modernidad, solo que no se vincula a la modernidad de Boulez. Por supuesto, la modernidad no es una sola. A veces, a los más radicales defensores de la vanguardia les cuesta entender eso.
Esta partitura es muy apreciable y además tiene la ventaja de que resulta fácil de entender por un público a quien quizá Boulez le parece demasiado complicado. Les recomiendo que la escuchen en esta más que notable versión de la Filarmónica de Radio France dirigida por Lionel Bringuier. Disfruten.