La Navidad ha dado pie a un subgénero cinematográfico. En él entran todas esas películas que las cadenas de TV emiten en la sobremesa de los fines de semana y los días de fiesta entre el puente de la Inmaculada y Reyes. También ha creado un subgénero literario, más bien centrado en el relato. Porque hay novelas navideñas, pero da la impresión de que el ambiente y la temática se prestan más a los cuentos.
Austral acaba de publicar un volumen bellamente editado con trece cuentos de Navidad. Las temáticas son relativamente diferentes, así como los estilos. Los autores resultan sin excepción figuras fundamentales de la literatura de sus países respectivos. Ahí están los hermanos Grimm y Andersen, en ambos casos por duplicado, Dickens, Hawthorne, Maupassant, Chéjov, Wilde, Pardo Bazán, O’Henry, Azorín y Cheever.
Algunos de esos cuentos han alcanzado un cierto grado de celebridad (aunque quizá ninguno llega a la del Cuento de Navidad de Dickens, que no figura en la recopilación), otros son menos conocidos. Pero todos son magníficos y presentan una cara distinta de la Navidad, menos convencional y edulcorada que la de esas películas estadounidenses para la sobremesa que parecen cortadas todas por el mismo patrón.
(Publicado en elcorreo.com)