He disfrutado con el discurso de ingreso a la Real Academia Española de la Lengua de Javier Marías. Son unas palabras muy interesantes que pueden encontrar aquí y que les recomiendo.
El nuevo académico explica las dificultades de cualquier tipo de narración a la hora de intentar recoger la realidad y destaca «la imposibilidad de contar nada acaecido, real, de manera absolutamente segura, veraz, objetiva, completa y definitiva». Nuestra vida, añade, «la conocemos sólo fragmentariamente y como envuelta en niebla». Ante esa imposibilidad, Marías defiende la ficción como una forma de «conocer lo improbable, además de los cierto». Y concluye: «sólo podemos contar así, cabalmente y con sus incontrovertibles principio y fin, lo que nunca ha sucedido».
El discurso me recuerda a una genial frase de una mago andaluz: «La verdad, sólo la verdad y nada más que la verdad…es lo más aburrido que existe».