¿Cómo se puede escribir un artículo sobre el premio Nobel (ojo, una opinión, no una información sobre dónde nació, qué ha escrito, qué ha dicho, etc.) sin haberlo leído?
Ningún crítico puede haberlo leído todo, por supuesto, ni siquiera en
el caso de este año, cuando todas las apuestas apuntaban a Estambul con
claridad. Pero ¿no sería mejor esperar a conocer al menos algo
de la obra de Pamuk antes de escribir un juicio sobre si la Academia
sueca ha acertado o no? Reconozco, con todo, la honradez de quienes
confiesan en el artículo esa ignorancia. Porque estoy seguro de que más de uno que no lo dice tampoco lo ha leído. No por eso deja de opinar. Faltaría más.