‘Nine to five’ es el tema estrella de una película de 1980 que en España se tituló ‘Cómo eliminar a su jefe’ y que nos describe la vida de tres mujeres que trabajaban en una oficina para un superior sexista y egoísta. Dolly Parton, que creó e interpretó la composición, Jane Fonda y Lily Tomlin las encarnaron en la gran pantalla. La historia es la adaptación cinematográfica de una obra literaria de la escritora Patricia Resnick.
Ahora debería continuar escribiendo de ‘Nine to five’ como canción, pero no puedo resistirme a introducir en este texto algunos asuntos candentes de nuestra sociedad en estos momentos y que vienen a cuento con la temática de esta obra musical.
Me refiero al empleo y a sus condiciones. ‘De nueve a cinco’ es el horario laboral habitual en Estados Unidos, impensable en nuestro entorno, donde se sabe cuándo empieza tu jornada, pero raras veces se conoce cuándo finaliza. Un título más español podría ser ‘De antes de las 9 a vete a saber cuándo’.
La crisis ha servido para acrecentar las tradicionales precarias condiciones del mercado laboral hispano y algunos empleadores –me niego a designarles como empresarios– se aprovechan de ello. Eso, por una parte. Por la otra, las mujeres siguen siendo las más damnificadas en este hábitat. Además de contar con peores remuneraciones, más de treinta años después de ‘Nine to five’, el sexismo sigue presente en su trabajo.
Para vencer esta situación desde 1973 en Estados Unidos funciona una organización también llamada ‘9 to 5’. Lucha por conseguir un mejor trato para la población femenina en el lugar de trabajo. Aquí esa idea ni siquiera ha sido planteada. Su germinación parece imposible en el actual escenario socioeconómico, donde tener un puesto de trabajo parece que te convierte en un afortunado y al mismo tiempo te invalida para reivindicaciones.
Satisfecha por hoy mi vena contestaria, volvamos a este tema musical, que, además de aparecer en la película a la que nos hemos referido, forma parte de un musical de teatro que obtuvo también gran éxito en Broadway casi tres décadas después. Su representación en ambas facetas artísticas fue muy taquillera. También la televisión acogió una serie basada en ‘De 9 a 5’.
La canción compuesta por Dolly Parton, y arreglada y producida por Gregg Perry, fue nominada sin éxito a los Oscar y a los Grammy, donde sí obtuvo los galardones al mejor tema country y a la mejor interpretación femenina. Sin embargo, donde cosechó verdadera repercusión fue entre el público y durante muchos años fue considerado el himno reivindicativo de quienes trabajaban en las miles de oficinas que asfaltan los rascacielos estadounidenses.
Fue número uno en su tierra y Dolly Parton se convirtió en la segunda americana que lo conseguía tras Jeannie C. Riley, que lo hizo en 1968. A este lado del Atlántico no tuvo tanto éxito, quizá porque reflejaba una visión muy americana del mundo laboral. Asimismo, ha sido incluida en la lista del centenar de temas fundamentales del cine confeccionada por el American Film Institute.
También el videoclip promocional de ‘9 to 5’ tenía mucho de cinematográfico, ya que al ritmo del tecleo de una máquina de escribir intercalaba imágenes de la película con otras de la interpretación que Parton y su banda realizaban del tema.
La canción a la que hoy nos referimos ha sido habitualmente confundida con otra que popularizó Sheena Easton. Inicialmente ambas se titularon ‘De nueve a cinco’, pero la cantante escocesa tuvo que renombrarla como ‘Morning train’ porque Parton poseía los derechos del título para el territorio norteamericano.
Mientras el tema que hoy analizamos habla de mujeres trabajadoras, ‘Tren de la mañana’ de Easton hace referencia a una chica enamorada que espera en casa todo el día el regreso del trabajo de su marido.
Me caigo de la cama y tropiezo hasta la cocina,
me sirvo una taza de ambición,
bostezo, me estiro e intento despertar a la vida
Salto a la ducha y la sangre comienza a circular,
fuera, en la calle, el tráfico empieza a rodar,
lleno de gente como yo,
en el trabajo, de nueve a cinco.
Trabajando de nueve a cinco,
qué manera de ganarse la vida
sobreviviendo justo, justo,
te cogen todo y te no dan nada
Usan tu mente,
y nunca te dan reconocimiento
suficiente para volverte loco si les dejas
De nueve a cinco, por servicio y lealtad,
Pienso que merezco una promoción justa
quiero seguir adelante,
pero el jefe no parece dispuesto a dejarme
algunas veces juraría que ese hombre me tiene manía
Te permiten soñar sólo para ver tus sueños hechos pedazos
estás a un solo peldaño en la carrera a ser jefe
pero tienes sueños que él nunca te va a quitar
En el mismo barco con un montón de amigos,
esperando al día en que tu barco zarpe,
y la marea se va a dar la vuelta,
y todo se va a poner de tu parte
De nueve a cinco,
te tienen donde quieren
hay una vida mejor,
y tu sueñas con ella, ¿no?
Es un juego de hombres ricos,
no importa cómo lo llamen,
y tú gastas tu vida metiendo el dinero en su cartera
De nueve a cinco,
qué manera de ganarse la vida
sobreviviendo justo justo,
te cogen todo y no te dan nada.
VERSIONES
La veterana cantante francesa RENÉE MARTEL ofreció la versión gala de la historia en 1981.
El mismo año la sueca KIKKI DANIELSSON, que formó parte del grupo eurovisivo Chips, también se fijó en este tema.
http://youtu.be/VUFuwnh78VQ
El tema de Dolly Parton recaló con éxito en tierras escandinavas, donde también la banda de punk sueca MILLENCOLIN se apropió de él.
En el cine, además de en la película ‘Como eliminar a su jefe’, de cuya banda sonora formó parte, ‘9 to 5’ apareció en las escenas iniciales de ‘The love guru’, de 2008, cantada por el personaje principal interpretado por MIKE MYERS acompañado por un sitar.
En la famosa serie ‘SESAME STREET’, ‘Los teleñecos’ en España, Polly Darton cantaba ‘One to five’.
DOLLY PARTON es un prodigio de la naturaleza musical que desde su Sevierville natal, en Tennesse, conquistó el panorama musical country estadounidense amparada por lapasión artística que heredó de su familia y que ejercitaba en la iglesia.
A los 12 años comenzó a interpretar algunos temas country en radio y televisión, y un año después ya grabó su primer disco y componía para otros artistas.
Vivió rodeada de pobreza hasta que se casó con Carl Dean, empresario del asfalto, quien impulsó su carrera. En los años siguientes llegaron los primeros éxitos, sobre todo ‘I will always love you’, tema por el que se interesó Elvis Presley, aunque el rey del rock nunca llegó a grabarlo porque no se alcanzó un acuerdo a la hora de repartir los derechos.
La fama mundial le llegó en la década de los ochenta del pasado siglo, cuando coqueteó con el pop por medio de canciones como la que hoy analizamos u otras como ‘Here you come again’, que vendió más de un millón de discos. Por entonces, también se especializó en fructíferos dúos y tríos musicales. Al mismo tiempo, compatibilizaba su carrera musical con intervenciones en películas.
Incansable, alcanzó el nuevo siglo cargada de energía y cosechó Grammys con su regreso al country con las canciones ‘The grass is blue’ y ‘Little sparrow’.
En la actualidad, con casi setenta años, sigue en los escenarios, en los platós y en la televisión. Aún le sobra fuerza.