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IÑAKI CERRAJERIA

La ilustración

Los sombreros del arco iris

 

LA METAMORFOSIS por ÁNGEL RESA

Si hace cuatro años, en el lenguaje político que invalidamos durante una semana, bauticé esta sección festiva como ‘La Metamorfosis’ se debía a algo. Vale, admito el homenaje al genial Frank Kafka por su inquietante modo de contar la transformación de un hombre en repugnante insecto. Pero el tiro no iba por ahí, sino que salía por la culata. Prueben a portar sombrero por las calles de Vitoria durante las 51 semanas que preceden y prosiguen al ciclo de La Blanca. Si lleváramos espejos retrovisores tal que a la altura de las orejas veríamos cómo un amplio sector de viandantes giraría el cuello de forma contorsionista para musitar una crítica velada a ese tipo estrafalario. Pero llegan las fechas bendecidas por la patrona y aparcamos en doble fila el sentido absurdo del ridículo. No admitimos cubrirnos la testa con un buen ejemplar fuera del calendario de las fiestas, pero durante seis días somos capaces de montar sobre pelos o calvas el cromatismo completo del arco iris.

Empezamos por los colores clásicos (blanco y negro) y hemos terminado por abrazar la paleta naif de Ágata Ruiz de la Prada, corazones estampados al margen. Ahora ya disponemos de gorros rojos en tono sanferminero, azules, verdes y hasta violetas. Todos ellos con una cintita que trata de añadir un toque de distinción a algo que solo recuperaremos, a lo sumo, en Nochevieja o carnavales, momentos que también nos rescatan de una manera de vestir circunspecta. Si a todo ello unimos unas gafas de montura plástica reflectante como para caminar tranquilos de noche por la autopista ya estamos dispuestos a tararear el último éxito de Enrique Iglesias. Lo de bailar contigo en una noche loca promete y cuadra con estas jornadas tan cronológicamente delimitadas de enajenación mental transitoria. ¡Ay, este Julito, que engendra hijos como otros descubren minas de oro y llegan al mundo con toda la panificadora debajo del brazo!

Si por algún motivo pierden momentáneamente el sentido de la vista hagan dos pruebas del nueve para saber que estamos en fiestas. La primera, comprueben lo difícil que resulta levantar las zapatillas en los bares sobre un suelo que parece compuesto de chicle armado. La segunda, apretar el dedo sobre el vaso de plástico que contiene la cerveza habitualmente tirada en recipiente de vidrio. Se entiende la cautela hostelera, pero el fruto de la cebada no sabe de igual manera. Diga usted que entre el sombrero fucsia, las lentes de pega y los abrazos cálidos a quienes el resto del año saludamos con un monosílabo gutural, tampoco es cuestión de ponerse estupendos como si viviéramos la feria de Munich junto a Pep Guardiola y la plantilla completa del Bayern.

En esta vida hay que tirar de influencias hasta para hacer masa en el estómago con el fin de seguir trasegando. Algún local en concreto decidió cerrar el comedor porque el tan valorado ‘slow food’ se convierte estos días en ingesta de comida rápida que cumple su función de masticar algo entre tragos y rinde mayores beneficios al establecimiento. Mil doscientos bocadillos, que colocados en hilera tal vez proporcionaran a Vitoria otro récord mundial del Guinness –el libro gordo, no la birra-, había despachado a medianoche un bar rodeado de gente por todas las partes. Y estaban buenos, una vez embutidos entre pecho y espalda. Así que cumplida la necesidad de meter algo sólido que nade entre el líquido ya puede uno marchar con la música a otra parte. Dijo Bogart que a él y a Ingrid Bergman siempre les quedaría París. Y está visto, más bien oído, que durante el ciclo de La Blanca siempre quedará bailar contigo en una noche loca. Ya lo canta Enrique Iglesias, el hijo de Julito. ¡Hey!

La actualidad en una sonrisa. Por Iñaki Cerrajería

Sobre el autor

La intención de este blog es recopilar mi trabajo diario en las páginas de EL CORREO. Caricaturas de escritores y otros personajes, las elecciones vascas con humor, páginas especiales, planas sobre fiestas de Vitoria-Gasteiz, San Prudencio, San Juan del Monte,... El fútbol con las jornadas del Deportivo Alavés, recreaciones de juicios, las ilustraciones para artículos y por supuesto, las tiras diarias de las ediciones de Álava y los domingos de Bizkaia y Miranda de Ebro. Desde todos estos espacios podéis acceder a las noticias, datos adjuntos y participar de forma activa añadiendo vuestros comentarios e ideas. Asimismo, encontrareis en las secciones del blog distintos trabajos que han sido publicados en años anteriores y que poco a poco voy añadiendo. Espero que sonriáis un poco navegando en este espacio.

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