Bares, vinotecas, chocolaterías, restaurantes, tiendas de ropa, peluquerías, oficinas y sedes de colegios profesionales. El Casco Viejo de Vitoria asiste a una fulgurante revitalización comercial a pesar de la crisis económica. Buena parte de las lonjas que hace dos años lucían carteles de ‘se vende’ o ‘se alquila’ acogen una frenética actividad. En unas hay operarios que ultiman nuevos mostradores. Otras ya están a pleno rendimiento. Y vendrán más. Basta con pasear por las calles de la almendra medieval para comprobarlo.
Álava