Ahora se lleva La noche es para mí, la canción con la que Soraya representará a España en Eurovisión. A lo mejor le va estupendamente, pero un tema que dice en el estribillo “come on and take me, come on and shake me, quiero saber lo que sientes por mí” se merece todos los fracasos que le caigan encima, por mucho que la chica sea simpática y que los arreglos morunos puedan recordar a alguna canción buena. Así que he decidido dedicar la sección de esta semana a un juego de magia blanca: para anular las vibraciones nefastas de La noche es para mí, escuchemos su negativo, la antimateria que la anula y devora. Hablo, claro, de La noche no es para mí, tema del grupo valenciano Vídeo que sonó bastante allá por los lejanos 80. Porque hubo un tiempo en el que nos creímos modernos. Y quizá nos engañábamos, pero siempre será mejor eso que actuar como europaletos.