Pocas cosas gustan más en algunos géneros que un buen título en latín. Por supuesto que los antiguos romanos también decían cosas triviales como ‘me gusta el pastel de manzana’ o ‘qué bonito atardecer’, pero la pervivencia de su idioma en corrientes como el black metal tiene, sobre todo, la bonita finalidad de invocar demonios, […]