Impás de espera en la vertiente norte del Kangchenjunga. Alex Txikon y sus compañeros de expedición templan armas en el campo base a la espera de un buen parte meteorológico que les ofrezca cuatro o cinco días de buen tiempo, los que necesitan para llegar a los 8.586 metros de la tercera montana más alta del planeta.
Y por lo que el vizcaíno avanzaba ayer, la espera no se va a prorrogar mucho. «Los partes que manejamos hablan de los días 17, 18 y 21 como los óptimos para cumbre, despejados y sin casi viento» explicaba ayer a través del teléfono vía satélite. «El 17 es demasiado pronto y el 21, tarde. Así que la opción más factible es el domingo 18».
Eso les obliga a salir pasado mañana mismo hacia la montaña. Aunque tienen un pequeño problema. Necesitan 200 metros de cuerda que ahora mismo está camino del campo base y sin los que no pueden ir hacia arriba. «Para evitar los seracs que cruza la vía británica hemos abierto una variante a su izquierda, más segura pero más técnica, en la que hemos utilizado más cuerda de la prevista, así que hemos
agotado la que teníamos y necesitamos esos 200 metros para equipar la arista norte camino de la cima».
Mañana será un día clave. Es cuando decidirán definitivamente la fecha y la estrategia del ataque a cumbre y cuando está previsto que llegue al CB la cuerda. “Nos la ha dejado la expedición de Carlos Soria, que está en la vertiente Sur de la montaña, por lo que los porteadores tienen que dar toda la vuelta a la montaña para traerla hasta aquí”.
El plan inicial de Alex, Denis Urubko, Adam Bielecki, Artem Braun y Dimitri Sinev en estos últimos cinco días de duro trabajo en la montaña era llegar hasta los 7.500 metros, “justo superando un torreón que hay encima del campo 3 (7.100 m.), la parte más técnica de la arista que lleva a la cima”, pero el gasto extra en cuarda les ha obligado a no poder equipar más allá de los 7.200 metros. “Lo que queda hasta los 7.500 lo equiparemos de camino a la cumbre”.
Y cuando bajen les quedará el verdadero objetivo de les ha llevado al Kangchenjunga. No hay que olvidar que el trabajo que están realizando en la vía británica de la cara Norte no es más que para aclimatarse de cara a abrir una nueva ruta en estilo alpino por el centro de la imponente pared de la cara Norte, de más de 3.000 metros de altura, que intentarán, Alex, Denis Urubko y Adam Bielecki. Una vez alcanzada la cima, todo el trabajo realizado estas semanas equipando la ruta británica les servirá para asegurar el descenso, que tienen previsto realizar por esta histórica vía abierta en 1979 por Doug Scott, Joe Tasker y Peter Boardman en lo que supuso un antes y un después en la historia del himalayismo.
Vistos los planes, el grupo apura las horas de descanso en el campo base. Hoy, sin ir más lejos, han celebrado el 31 cumpleaños del polaco Adam Bielecki. “Aquí nos convertimos en una pequeña familia y estos momentos hay que aprovecharlos para relajarnos y evadirnos. Nuestro cocinero Ringi le ha preparado una tarta a Adam y nosotros le hemos regalado unos patucos que ha hecho Artem y el último libro que ha escrito Denis firmado por todos”.