Cuando escribo estas líneas, el concilio de los demócratas ya ha investido a Barack Obama como nuevo candidato oficial a la Casa Blanca. Lo esperado, vamos. Y no, no me he vuelto loco y he convertido un inocente blog de videojuegos en una sesuda tribuna de opinión sobre la alta política estadounidense. Todo esto viene a colación porque el partido aspirante a la presidencia de EE UU ha decidido recurrir a los divertimentos cibernéticos para “aliviar la tensión” de los centenares de periodistas y técnicos que trabajan estos días en su convención. Nada como un buen juego para aliviar el estrés de tanto discurso anti-Bush, además de masajes e incluso un bar de oxígeno. Muy fuerte.
Lo más curioso es que la consola elegida para “olvidarse” del congreso por unos momentos es, nada más y nada menos, que la Wii. De esta forma, los periodistas pueden divertirse al mismo tiempo que hacen un poco de ejercicio, ya que en esta maratoniana convención lo más normal es estar “pegado” a la silla para recoger los discursos de los líderes demócratas. Al parecer, WiiSports está siendo el pasatiempo preferido por los periodistas y, en concreto, las partidas de bolos. Muy americano. Lo que está claro es que todo ello supone una muestra más de la importancia que la plataforma de Nintendo está adquiriendo en la sociedad estadounidense por delante de consolas de mayor bagaje tecnológico. O eso, o que la Xbox 360 y la PS3 son republicanas. A saber.