Nuestra selección de este mes está más repleta que nunca de artistas nacionales: ha querido la casualidad que se agolpen en unos pocos días algunos de nuestros músicos favoritos de ayer y de hoy. Vamos con ocho citas en otros tantos recintos.
Corcobado (día 10, Alhóndiga). Ya saben que Corcobado es desde hace años un vizcaíno adoptivo, feliz circunstancia que nos permite disfrutar de conciertos suyos relativamente a menudo. Esta vez, se materializará en la Azkúniga para presentar su nuevo álbum, Mujer y victoria, donde conviven sus eternas oscuridades con tiernas canciones de paternidad o su versión del Amigo de Roberto Carlos, tan emocionante en directo.
Los Ganglios (día 11, Bilborock). Si no han estado nunca en un concierto de Los Ganglios, les falta una de las experiencias más singulares y divertidas del actual panorama musical. Bueno, musical, videográfico y humorístico, aunque yo siempre defiendo que las canciones de estos tipos esconden más seriedad de lo que parece. Vienen como parte del festi Tracking Bilbao, en un concierto (¡gratis hasta completar aforo!) que abre otro sujeto difícilmente clasificable, Manuel Noguera.
Ming City Rockers (día 16, Beleza Malandra / día 19, Satélite T). El cuarteto de Immingham (sí, así se llama el pueblo inglés del que proceden) recala por partida doble en Bizkaia, así que podremos verlos con nocturnidad en Bermeo y con rabas en Deusto. Aparte de lucir las chulas pintas de la foto de arriba, su punk melódico con el deje arrastrado del glam promete un directo muy satisfactorio y propenso a la ebriedad.
Biznaga (día 18, Santana 27). Lo confieso, no compartí el entusiasmo de Cubillo ante su visita de hace un par de años, pero creo que parte de la culpa fue del ambiente: tal vez me haya hecho demasiado viejo para un público tan juvenil como el que arrastró el grupo madrileño, pero el caso es que invertí demasiado rato en odiar a un pasmarote con rollo de Ian Curtis que se me puso delante. En fin, el nuevo disco de Biznaga me parece arrollador, impetuosísimo, con un potencial tremendo para los conciertos, así que simplemente será cosa de alejarme si aparece de nuevo el pasmarote.
António Zambujo con Santiago Auserón (día 23, Teatro Campos). Auserón ejerce de anfitrión (chimpón) en un ciclo de cuatro veladas bautizado como Voces de la ría: cada sesión se abrirá con una entrevista al invitado de la jornada y, después, el artista en cuestión ofrecerá un concierto «en formato cercano», acompañado en algunos temas por el propio maestro de ceremonias. El invitado que más me interesa es el portugués Zambujo, un fadista cool que combina el género con cante alentejano, jazz, música africana y sonoridades brasileñas. Su disco Quinto es un clásico en mi casa.
Teenage Fanclub (día 24, Kafe Antzokia). Qué vamos a decir a estas alturas de los escoceses, maestros del caramelo envuelto en guitarras y de la belleza melancólica heredada de Big Star. Con una carrera que se acerca ya a las tres décadas, Teenage Fanclub han sabido mantener un control de calidad escrupuloso y consistente y son, en fin, clásicos en lo suyo. El concierto lo organiza la gente de WOP y las entradas están agotadas.
GG Quintanilla y Comando Suzie (día 25, Shake!). Ya recomendaría este concierto por el cabeza de cartel, el señor GG Quintanilla, que viene (o vuelve, porque al fin y al cabo es de Portu) acompañado por su grupo El Telón de Acero. Pero es que además se trae de telonero a uno de los santos patrones de este blog: los barceloneses Comando Suzie, con su costumbrismo electrónico y su estupefacción existencial, son autores de canciones tan mayúsculas como esta, esta o esta. Qué pena que vayan a tocar «en formato íntimo» y no «con orquesta», como dice su comandante.
Marco Serrato (día 25, Sarean). Me da rabia que la cita con el Comando coincida con la actuación de Marco Serrato en la plaza del Corazón de María, aunque creo que, si no hay retrasos y las piernas responden, se podrá acudir a las dos cosas. Serrato es conocido sobre todo como bajista y vocalista de los sevillanos Orthodox, grupo que partió del doom nazareno y ha evolucionado hacia una especie de free doom jazz, con perdón por la abominable etiqueta, pero también forma parte de otros proyectos interesantes, como los ominosos Jacob. Esta vez se anunciaba en solitario y en plan improvisador, dispuesto a abrir la puerta a los demonios que habitan en la caja de su contrabajo, pero veo que se ha sumado la Txaranga Urretabizkaia, un sexteto de viento que (a juzgar por los miembros que me suenan) no tocará precisamente Calderete.
Vamos con un poquito de Teenage Fanclub.