Todas las consideraciones racionales y las reflexiones eruditas quedan inmediatamente abolidas ante una canción como Fin del mundo, un chupito dulce y cabezón que emborracha al oyente y le hace comportarse como un tontuelo, un ser bailoteante y canturreante con una sonrisa cada vez más amplia. Supongo que, con una buena dosis de autodisciplina, uno podría ponerse serio y analizar la filiación sesentera y la arquitectura ultrapop de la canción, pero… ¿para qué? No sirve de mucho: siempre habrá gente inmune a este tipo de frescura, tipos cenizos a los que no se puede convencer con razones, y luego estamos los demás, que ni siquiera llegaremos a escuchar los argumentos porque estamos coreando «mundoooo, mundoooo, mundoooo».

Con esta, ya llevamos dos canciones apocalípticas consecutivas, pero evidentemente la disolución poética de The Sleep Of Death no tiene nada que ver con la urgencia vitalista y atropellada de hoy. Fin del mundo es el nuevo sencillo de Cola Jet Set, el grupo que formó Felipe (en el centro de la foto) tras la disolución de Los Fresones Rebeldes, y se ajusta a su fórmula de eficacia probada para elaborar golosinas melódicas. Aquí, por cierto, pueden descargarlo gratis. Un amigo mío dice que la canción habría sido todavía más redonda si durase solo dos minutos, pero es una bobada: total, vas a volver a darle al play en cuanto acabe.