Es fácil, simplemente recuerden lo que pasa cuando se come una guindilla. Primero, quema y, después, quedamos tan doloridos que durante un tiempo no sentimos la lengua. Estupendo, y ¿si utilizamos esa falta de sensibilidad para atenuar el dolor después de una operación quirúrgica? Ahora sabemos, tal como relata Paul White, de la Universidad de […]