Uno de cada cinco penalties lo para el portero, uno de cada quince no acierta con la portería, y tres de cada cuatro son gol, aunque los mejores especialistas llegan a cuatro de cada cinco. El mejor resultado para el chutador se obtiene cuando dispara a los 4, 5 ó 6 pasos de la carrera que toma para la jugada. Da igual que el chutador sea zurdo o diestro. Ningún disparo por encima de la cintura del portero es detenido, aunque un 18% de ellos no entran en la portería. El portero siempre se mueve antes del chut. Todavía no hay suficientes datos, según Hughes y Wells, pero parece que se obtienen los mejores resultados para el portero si da un paso adelante y se mantiene quieto mientras el chutador se acerca al balón. Además, según López Botella y Palao, de la Universidad Católica San Antonio, de Murcia, los diestros suelen disparar hacia la derecha del portero y los zurdos hacia la izquierda, y tanto diestros como zurdos chutan hacia la zona baja de la portería.
Geert Savelsbergh y su grupo, de la Universidad Libre de Amsterdam, por medio de un sistema informático que incluye un joystick, han demostrado que los porteros veteranos detienen más penalties que los novatos. Tardan más en moverse en respuesta al disparo y se fijan, sobre todo, en la posición de las piernas, tanto la que dispara como la de apoyo, además del lugar del balón sobre el que impacta el chutador. El portero novato tiende a distraerse buscando más datos que le den una pista sobre el disparo: posición de los brazos y del tronco, los ojos,…
Para terminar, según Michael Bar-Eli y sus colaboradores, de la Universidad Ben-Gurion, del Negev, en Israel, y después de analizar 286 penalties, el comportamiento óptimo para detener un penalty es no moverse hasta el último momento. Está claro que si el disparo es muy fuerte, los 0,2-0,3 segundos de tiempo hasta que la pelota llega a la altura del portero no dan tiempo a detener el chut. Pero, si se espera, como hacen los porteros veteranos, es más fácil de parar pues el delantero casi nunca dispara a gran velocidad, ya que controla peor la dirección y el balón puede ir fuera de la portería. En resumen, según Bar-Eli y su equipo, para detener un penalty lo mejor es no hacer nada. Hasta el último momento, claro está.
*Bar-Eli, M., O.H. Azar, I. Ritov, Y. Keidar-Levin & G. Schein. 2007. Action bias among elite soccer goalkeepers: The case of penalty kicks. Journal of Economic Psychology 28: 606-621.
*Hughes, M. & J. Wells. 2002. Analysis of penalties taken in shoot-outs. International Journal of Performance Analysis in Sport 2: 55-72.
*López-Botella, M. & J.M. Palao. 2007. Relationship between laterality of foot strike and shot zone on penalty efficacy in specialist penalty takers. International Journal of Performance Analysis in Sport 7: 26-36.
*Savelsbergh, G., Williams A.M., Van Der Kamp, J. & P. Ward. 2002. Visual search, anticipation and expertise in soccer goalkeepers. Journal of Sports Sciences 20: 279-287.