En este plato lo realmente diferente es la salsa, muy fácil de realizar, de sorprendente sabor y además deliciosa.
Ingredientes (2 personas):
6 cucharadas soperas de preparado de cous cous marroquí (sémola de trigo precocida, tomate, pipas de girasol, ajo, pimiento rojo, cebolla, comino, menta, chile jalapeño y cilantro).
4 lonchas de panceta ahumada
4 trozos de churrasco
1 tomate
3 cucharadas soperas de pipas de girasol
1 cucharada sopera de azúcar
1 pastilla de concentrado de carne
6 cucharadas de salsa de soja
Aceite de oliva
Pimienta negra
Sal
Preparación:
Comenzamos por preparar el cous cous marroquí, según las instrucciones del fabricante.
Llevamos agua a ebullición en una cazuela, junto con media pastilla de concentrado de carne, aproximadamente tres veces el volumen de la cantidad de cous cous que vamos a cocinar.
Cuando el agua comience a hervir, añadimos el cous cous, removemos, tapamos y apagamos el fuego.
Mientras se nos hidrata el cous cous, colocamos una sartén al fuego con un poco de aceite y freímos la panceta ahumada, reservando esta.
A continuación colocamos los churrascos en la misma sartén y el tomate cortado en dos.
Doramos los churrascos, salpimentando estos y tapamos la sartén dejando esta a fuego muy bajo.
Cuando el tomate comience a estar tierno, le damos la vuelta y lo salpimentamos en su parte interior.
Cuando tengamos el churrasco casi terminado, en una sartén pequeña, colocamos la salsa de soja, las semillas de girasol, ½ pastilla de concentrado de carne y el azúcar, hasta llevar a ebullición.
Solo nos resta montar el plato.
Cubrimos las paredes previamente aceitadas de un aro de emplatar con dos lonchas de panceta ahumada y rellenamos con el cous cous.
Desmoldamos el aro y colocamos dos trozos de churrasco en el plato y medio tomate en el plato.
Repetimos la operación con el siguiente plato y repartimos la salsa sobre el cous cous y el tomate.
Servir caliente.