Esta noche cenaremos el invento que veis, el cual cocine
hace un par de días, pero como se puede comer en frio (a pesar de ser invierno)
aprovecho para degustarlo esta noche.
Se trata de una tortilla al horno con base de hojaldre,
nunca he comido una tortilla con el “pan” incorporado, pero si no se prueba no
se sabe a que sabe, aunque sigo opinando que la mejor tortilla del mundo es la típica
tortilla de patatas con cebollita, pero hay que reconocer que esta rica hasta
la tortilla deconstruida de Ferran Adrià.
Ingredientes (2 personas)
1 lamina de hojaldre congelada
2 puñaditos de gambas peladas congeladas
1 berenjena
2 tomates
1/2 pimiento
1 cebolla
3 huevos
Aceite
Sal
Azúcar
Pimienta
Escarola (o lechuga, para decorar)
Queso
Preparación:
En primer lugar horneamos el hojaldre pinchándolo con un
tenedor a 200 grados alrededor de un cuarto de hora o hasta que lo veamos
doradito.
Mientras se nos hace el hojaldre, preparamos el sofrito.
Picamos finamente (yo como soy vago utilice un robot y
prepare gran cantidad de sofrito para congelarlo y tener para otras futuras
recetas), pero bueno, picamos la berenjena, la cebolla, el ½ pimiento, los
tomates y sazonamos añadiendo una cucharadita de azúcar para que el tomate no
nos quede acido.
Mientras batimos los tres huevos y cuando el sofrito este
listo y frio, lo añadimos a los huevos.
Colocamos sobre el hojaldre en una fuente alta y con papel
de horno en el fondo para poder desmoldar con facilidad.
Cubrimos el hojaldre como digo en el párrafo anterior y
dejamos en el horno a 180 grados hasta que cuaje.
Dejamos enfriar y a la nevera.
En el momento de servir, desmoldamos y decoramos con la escarola.
Buen provecho.