“¿Se imaginan que el Tribunal de Estrasburgo condene a España por vulnerar los derechos que contienen sus propias normas, o sea, por hacerse trampas al solitario? Inenarrable”. (Lo leía en J. Yoldi, hace tres meses).
Pues eso ha sucedido. La “Doctrina Parot”, es absolutamente ilegal y, por ende, injusta. El gobierno español ha decidido apelar. No tienen remedio.
Qué pena tener que escribir esto, hoy, 15º aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco, (Ermua), que representa uno de los días más dolorosos que guardo en la memoria, y que me ha condicionado definitivamente hasta hoy.