Verán Ustedes, no son tiempos fáciles para lo que les comento. Todos estamos expectantes ante una realidad social que no remonta. Nos conformamos con oír que no ha empeorado, pero ni eso. Secretamente esperamos la sorpresa de un día para otro, pero sabemos que nadie nos va a regalar nada. Y en esa atmósfera de aliento contenido y vivir el día a día, nos reclaman desde mil instancias para dialogar, aprender, compartir y luchar. Hace años, el movimiento ciudadano tenía una vitalidad extrema entre nosotros, Vitoria-Gasteiz. Las más diversas causas humanas siempre tenían su gente y su ideario. Todavía camina y resiste esa gente admirable en la ciudad. Muy honestamente, en la Iglesia siempre hemos tenido unas escuelas de formación social y de formación cristiana, que por la tarde-noche, y para adultos, brindan un espacio para fortalecer la mente y el corazón. La Escuela Social, la Escuela de Teología para Laicos, y la Escuela de Formación de Laicos Cristianos están ahí, sumando lo mejor del cristianismo a la ciudad y a su gente. Se me ha ocurrido que una carta al director también es modo adecuado para ofrecer estas escuelas en medio de la plaza pública. Buen viaje a la oferta y bienvenidas sean las personas que quieren hacer ciudad desde la fe y los derechos humanos.
José Ignacio Calleja
Profesor de Ética Social Cristiana
Vitoria-Gasteiz