Para mí era el gran concierto del puente. Y, además, gratis, para celebrar el aniversario de la sala Azkena. Pero no ha habido suerte: la promotora Noise On Tour ha comunicado hace unos minutos que el grupo neoyorquino A Place To Bury Strangers se ha quedado atrapado en Italia y no podrá estar mañana en Bilbao. Y no, no cubran de nuevos improperios a los controladores, que ellos no han tenido nada que ver. “Nos robaron la furgoneta anoche en Roma. Nos las hemos arreglado para conseguir otra aquí, pero el pasaporte de Dion (el bajista) también fue robado y no podemos solucionarlo hasta el lunes, así que no hay manera de llegar a tiempo a Bilbao, me temo. Nos aseguraremos de ir por allí en la próxima gira europea, esperamos que en mayo”, explica la banda en su mensaje. Nuestro oído interno lo agradecerá, porque es un egoísta y se ahorra dos o tres días de pitidos, pero es una pena.