Crédito: Jen Miller y Alegría Chávez / Observatorio Gemini
El pasado 16 de diciembre desde el telescopio Gemini Norte , situado en Hawai -el Gemini Sur, su gemelo, se encuentra en Atacama-, observaban Ío, una de las más interesantes lunas del Sistema Solar por su actividad volcánica, por sorpresa, se encontraron con que Europa transitaba por delante de este. Aunque algunos lo llamen ocultación, técnicamente se trata de un tránsito, por ser el disco de Ío menor que el de Europa. Cuando el cuerpo que pasa por delante es mayor, se llama ocultación. Aquí una animación:
Crédito: Jen Miller y Alegría Chávez / Observatorio Gemini
Por cierto, la actividad volcánica la encontraron. Hay dos puntos brillantes, uno a la izquierda y otro -no tan brillante- a la derecha, que son volcanes activos. Aquí lo teneis en detalle:
Crédito: Jen Miller y Alegría Chávez / Observatorio Gemini
Crédito: Jen Miller y Alegría Chávez / Observatorio Gemini
Desde el observatorio observaban Ío en banda L -microondas, no luz visible-, donde Europa es casi invisible debido al hielo de su superficie. La superficie de Io contiene dióxido de azufre, que refleja más luz solar en esa banda L, haciendo Io que aparezca brillante. Tras la ocultación las imágenes fueron captadas en banda K, microondas, pero en una zona cercana al infrarrojo, donde tanto Io y Europa reflejan luz solar y por lo tanto son ambos satélites visibles
Lo más curioso es que todo fue fruto de la casualidad. Observaban Ío con el objetivo de captar erupciones volcánicas. Los observadores Jen Miller y Alegría Chávez notaron algo extraño al inicio de la observación. Así lo registraron: “… el objetivo parece una media luna, como Venus o la Luna…“
Curiosamente Ramón Naves ha estado siguiendo este tipo de eventos desde su observatorio. No tiene recogido ese evento, pero si unos cuantos de este mismo mes de diciembre. Como ejemplo, este de publicado el 21 de diciembre -suponemos que será de la noche anterior-, en el que están incolucrados Ío, Calixto y Ganimedes.
Crédito: Ramón Naves / Observatorio Montcabrer MPC 213
En el caso de Ramón, se trata de un seguimiento fotométrico, es decir, midiendo la luz que nos llega. Tremenda la capacidad de Gemini que, con su óptica adaptativa, convierte en mundos lo que hasta hace poco no eran más que puntos de luz.