La red lleva unos días alborotada a cuenta de una posible grabación, por parte de un paracaidista noruego de la llegada a Tierra de un meteorito. Cuando imaginamos la caída de un objeto así, lo imaginamos como el las películas o dibujos animados, envuelto en fuego. En realidad, no ocurre de esta manera. Cuando un cuerpo externo a la Tierra penetra en la atmósfera, lo hace a gran velocidad. Tanto por su velocidad propia como por que la Tierra recorre su órbita a la friolera de casi 30 km/s. A esas velocidades, la fricción con la atmósfera hace que el cuerpo se caliente y “arda”, emitiendo luz. Pero, a medida que va cayendo, se va frenando. La fricción disminuye y, si no se ha desintegrado por completo, llega al denominado “vuelo oscuro”. El objeto cae a gran velocidad, pero no hay fricción suficiente para que arda.
Algo así grabó el noruego Anders Helstrup el 17 de junio de 2012. El no se percató de nada, pero la cámara de su casco lo grabó. Aquí está el video:
Un equipo de expertos noruegos han estado, todo este tiempo, tratando de averiguar si se trata de un meteorito real. Trataron, en vano, de localizarlo sobre el terreno. Todos los esfuerzos han resultado inútiles. Debido a la imposibilidad de avanzar en el tema, han hecho público el vídeo, para tratar de recabar ayuda para resolver el caso.
Si hasta ahora no hemos publicado nada al respecto es porque nos resultaba muy raro que fuese real. Expertos internacionales, aún con reparos, le han dado credibilidad. Pero resulta que se trataba de una simple piedra.
¿Por qué dudábamos de que se tratara de un meteorito? Sobre todo, por la inclinación de la caída. No es imposible que un meteorito caiga de esa manera, pero es como caería una piedra soltada, de alguna manera, a más altura. Y si aplicamos la navaja de Ockham…
Otro dato que nos hacía dudar es que no había nadie que hubiera visto la caída del objeto en su fase inicial. Para llegar a Tierra con ese tamaño, tenía que ser un objeto bastante grande, lo que nos lleva a un brillo realmente inusual. El que fuese de día complicaba la observación, pero era raro la ausencia total de reportes de observación.
¿Cual es la noticia hoy? Que se trataba de una roca que se enredó accidentalmente en el paracaídas en un salto anterior. Steinar Midtskogen, una de las personas involucradas en el vídeo, ha escrito un artículo con la historia. Lo sucedido, básicamente, es que la piedra, en el interior de la bolsa del paracaídas, se liberó cuando Anders lo desplegó. Caen más o menos a la par hasta que, cuando se despliega el paracaidas, la piedra le supera y pasa a gran velocidad. Velocidad grande, pero pequeña, para lo que se espera de un meteorito que llega a la Tierra.
¿Que es lo mejor del caso? Sobre todo la honestidad de todos los implicados en el caso. Investigaron el caso en silencio y, cuando vieron que se encontraban en una vía muerta, hicieron público el caso. No para hacerse famosos por ello o gracias a un vídeo viral en la red, sino para descubrir la verdad. Y, en cuanto se ha sabido la verdad, han sido los primeros en hacerlo público. ¡Chapeau! ¡Así se hacen las cosas!