¡Cómo mola ser malote! Poner cara de duro cuando miras a los demás, especialmente si fueran de grupos inferiores: mujeres, inmigrantes, extranjeros, ajenos… y si alguno toca mucho las narices, algún rapero, por ejemplo, se le quita de enmedio. Se me ocurren casos diversos con diversos nombres, y no siempre se les tiene por de ultraderecha ni son de lejos pero, en el caso que nos ocupa -Grecia- se hacen llamar Amanecer Dorado. Todo es siempre muy nuevo y brillante, claro. Puestos a prometer… se les olvida que son ellos los que nos meten en la noche. Espero que esta policía le aguantara bien la mirada.