Aunque pocos de los que viven aquí se lo crean, Vitoria sorprende al foráneo que llega por vez primera por bonita, tranquila, peatonal y verde y también por la amabilidad de sus habitantes. Tan buena parece resultar la experiencia vitoriana que ocho de cada diez turistas repetiría periplo, según algunas de las conclusiones del estudio del servicio.
Tras sus garbeos por la ciudad, los visitantes puntúan con sobresaliente sus zonas peatonales y paseos –un 9 de nota media–, los jardines, parques y el anillo verde –8,8– y la onmipresente buena gastronomía –8,6–.