La Wiiestá que no para. Hace unos días, comentábamos aquí la llegada a Europa del Wiiware, un nuevo espacio online donde poder descargarse juegos originales desde el menú de nuestra consola. Y, desde ayer, los usuarios de la blanca pueden acceder desde el mismo lugar al Canal Nintendo, un lugar donde poder estar informados de los nuevos lanzamientos, acompañados por vídeos, entrevistas y, por supuesto, ‘demos’. Y todo ello sin que nos cueste un duro.
Lo que está claro es Nintendo apuesta claramente por los aspectos online de su consola para no quedarse atrás respecto a la PS3 y Xbox 360, aunque, y no me canso en repetirlo, la Wiijuega en otra liga. Ni mejor ni peor, pero otra liga. No obstante, sus usuarios podrían sentirse heridos en su orgullo si no pudiesen jugar online, descargar juegos originales o bajarse ‘demos’ de los próximos lanzamientos como sucede en las plataformas anteriormente citadas. Por si fuera poco, la multinacional nipona quiere aprovechar este nuevo canal no sólo para promocionar la blanca sino también la DS, otra suculenta fuente de ingresos para ella.
En ese sentido, podremos pasar de forma inalámbrica ‘demos’ de la Wiia la DS. Toda una gozada que permitirá a los usuarios de la consola portátil estar a la última. Incluso podremos disfrutar en exclusiva versiones de prueba de futuros lanzamientos e incluso opinar sobre ellos, lo que puede poner al borde de un ataque de nervios a más de un desarrollador. Asimismo, el canal ofrecerá todo tipo de información sobre los viejos, actuales y futuros éxitos de Nintendo, así como guías descargables de nuestros juegos favoritos.
Nintendo demuestra con estos nuevos servicios que sigue en primera línea de fuego en la llamada guerra de las consolas, tanto en las de sobremesas como en las portátiles. Sus originales y llamativas estrategias jugables han obtenido su justa recompensa liderando las listas de ventas en todo el mundo. Ahora bien, quizás haya llegado el momento de pensar en una Wii y DS 2.0 con mayor potencial tecnológico ante un mercado que gira claramente hacia los gráficos en alta definición. Será sin duda la nueva frontera de la multinacional japonesa aunque sea a costa de encarecer sus productos. Pero, en su caso, lo más difícil está ya hecho.