Segundas partes nunca fueron buenas. Mentira. En multitud de ocasiones, una secuela supera al original y ese es el caso de Condemned 2, el survival horror de Monolith Software que llega para PS3 y Xbox 360 distribuido por Sega. Su primera entrega fue un original juego de acción, pero ahora surge de nuevo aprendiendo de los errores pasados y con multitud de opciones como la de multijugador, imprescindible en todo shooter que se precie. Y es que primero hay que ponerse en situación. Condemned era un juego de terror de lo más sutil, que se dedicaba a sacar a la luz nuestros miedos más profundos e íntimos reflejados en su protagonista principal. Su segunda parte, con el subtítulo de Bloodshot, vuelve a explorar este inquietante camino pero con un nuevo giro de tuerca que lo hace imprescindible en cualquier jugoteca. Un camino donde ficción y realidad se dan la mano. Así, volveremos a encontrarnos con Ethan Thomas, agente de la unidad de crímenes en serie (SCU), aunque ya no es el mismo que el de la primera parte. En otras palabras, ha tocado fondo por su adicción al alcohol, aunque es requerido de nuevo por sus superiores para investigar un misterioso vídeo en el que se ve huyendo a un hombre totalmente aterrorizado. Y no vamos a caer en la tentación de destriparos el tortuoso argumento cargado de sorpresas y alucinantes escenas visuales no aptas para cardiacos. Como no podía ser de otra forma, un título de estas características exige unos gráficos de una gran calidad y Condemned 2 los tiene. Además de la cuidada ambientación de sus sórdidos escenarios, encontraremos una gran variedad de enemigos con un aspecto visual tan detallado como aterrador. Pero no se trata de matar sin ton ni son. También deberemos investigar las diferentes escenas de los crímenes como si fuéramos un CSI, lo que será indispensable para avanzar en lo que ya es uno de los mejores juegos de la temporada.
