El éxito es caprichoso y poco de fiar. Lo pensaba anoche viendo en La Nube a Last Great Dreamers, un grupo de veteranos pintureros de la escena londinense que perfectamente podrían triunfar en escenarios muy grandes y no tocando ante cuarenta personas en Santutxu (aunque, claro, qué lujo tenerlos ahí, y gratis, y triunfando también). Los Soñadores de marras, tocados con sus sombreros, hacen un glam rock para todos los públicos con mucho de power pop, ramalazos de los Beatles y cierto toque noventero, como si hubiesen bañado el punk-pop en aromas retro. Pero lo más importante son las canciones, y resulta que todo lo que interpretaron oscilaba entre bueno y muy bueno, desde el material de su primer álbum (de 1994) hasta el del cuarto (editado en 2016). En ese disco seminuevo y financiado por crowdfunding aparece The Way We Collide, un tema de amor en términos cósmicos con resplandeciente estribillo beatle. La tengo tan metida en la cabeza que voy a saltarme una de mis normas y voy a colgar un enlace de Spotify, porque (a ver qué pasa, Dreamers) no la encuentro compartible en ningún sitio.