Yo creía que esta canción ya se la había colgado alguna vez, pero parece que no, así que aprovecho para celebrar que sus intérpretes, la banda argentina Embajada Boliviana, se han reunido para una gira. Embajada Boliviana (ya, es un nombre bastante inadecuado para un grupo, pero supongo que en cierto modo eso mismo lo hace brillante) empezaron a principios de los 90 con una fortísima influencia de los Ramones, como tantas y tantas bandas, pero supieron evolucionar bastante hasta su disolución en el año 2000. Lo suyo, según describió en una ocasión el vocalista, son «canciones melódicas con guitarras distorsionadas que hablan de historias simples con letras sentimentales». Ah, no le den mucha importancia al acompañamiento visual: «Puras fotos mías y un vídeo todo mal hecho, pero no importa, es mío, así que se chingan si no les gusta», avisa en YouTube su autora.