El australiano Graeme Brown, del equipo Rabobank, ha ganado la primera etapa de la Vuelta Ciclista a Murcia al imponerse al esprint, en la meta de Lorca, al neozelandés Greg Henderson, de Team Columbia, y Rubén Pérez, de Euskaltel.

El esprinter oceánico se ha convertido en el primer maillot amarillo y líder de la regularidad.

La etapa, que salió desde San Pedro del Pinatar, resultó bastante movida y animada por las diferentes escapadas y sobre todo por el fuerte viento. La primera de ellas llegó después de la primera meta volante, en Torre Pacheco, a 21 kilómetros.

José Antonio López Gil (Andalucía Cajasol), Marcos García (Xacobeo Galicia)y Pedro José Vera (Contentpolis) saltaron del pelotón y llegaron a tener 6 minutos de ventaja (km. 38).

Sin embargo, pasada la primera hora de carrera, el pelotón comenzó a limar ese retraso y, al paso de la segunda meta volante, en Alhama, la ventaja sólo era de 3,10.

Pasado el kilómetro 150, el fuerte ritmo del Rabobank, que estaba dominando la carrera, provocó un corte de nueve unidades en el que consiguió colocar a seis de sus ocho corredores, entre ellos a Grame Brown.

Estos nueve pronto alcanzaron a los tres de cabeza, que pusieron la directa hacia la meta de Lorca.

Por detrás, un nuevo corte provocó una nueva fuga de quince unidades, que se fusionaron con los doce de cabeza a falta de quince kilómetros.

Estos veintisiete corredores, ya con poco más de un minuto de ventaja sobre el grupo principal, fueron los que se jugaron el triunfo de etapa. El hombre más rápido, Graeme Brown, cumplió los pronósticos y ganó la etapa con Henderson y Pérez escoltándole en el podio.

Mañana, jueves, se disputará la segunda etapa, entre Las Torres de Cotillas y Caravaca (175,1 kilómetros), con el Alto de San Juan, de primera categoría, a 50 kilómetros de la meta.