>

Blogs

Simone Moro se retira del Broad Peak

Una temporada más, no pudo ser. Los ochomiles de Pakistán seguirán, un año más, vírgenes. Simone Moro y sus dos compañeros paquistaníes se vuelven ya para casa. Han agotado todas las posibilidades y, sobre todo, el tiempo en el Broad Peak. Y ni mucho menos se puede decir que han abandonado. Todo lo contrario. Su retirada el pasado fin de semana cuando se encontrado a 7.800 metros de altitud, a menos de 300 metros de la cumbre, les honra. Después de padecer semanas y semanas de frío y mal tiempo, por fin disfrutaron de unos días buenos. El día de cumbre «El tiempo era fantástico; el viento soplaba suave y había sol… pero al llegar a los 7.800 metros mi reloj marcaba las 14:00, muy tarde para continuar», explica Simone. Y es que ése fue el único problema: se les hizo demasiado tarde buscando la ruta correcta. Según sus cálculos, hubiesen llegado a la cima sobre las cuatro de la tarde. «Coronar la montaña a esa hora, en invierno, era un suicidio. Hubiese sido imposible resistir y organizar un vivac durante el descenso. Nos costó, pero tomamos la decisión más razonable. Teníamos que darnos la vuelta y llegar lo antes posible hasta el último campo de altura». Y pese a haberlo tenido tan cerca, Simone en absoluto se arrepiente de haberse dado media vuelta: «Estábamos muy cerca y mis condiciones físicas se mantenían en buen estado, pero usamos el cerebro en vez de los músculos. Nunca he aprobado a los escaladores que luchan por una cumbre cuando se les hace tarde, arriesgándose demasiado, perdiendo a veces la vida por tomar una mala decisión. Se sobrevive más veces guiándote con la cabeza que con el ego». Una decisión que sin duda le honra y dice mucho de su madurez como alpinista.
Pero lejos de lo que pueda parecer. Simone no se da por vencido y ya priensa en el próximo invierno… «He dado lo mejor de mi, he usado todo mi poder físico y mental, he agotado mis energías durante otro invierno completo en el Broad Peak, y creo que he dejado claro que se pueden alcanzar grandes y extremas metas con solo un pequeño equipo sin apoyo externo. Seguro que en un futuro próximo alguien escalará un 8.000 del Karakorum en invierno, quizá por eso regrese el año que viene, de nuevo aquí, de nuevo en invierno». ¡Eso esperamos los buenos aficionados al alpinismo, Simone!

Por Fernando J. Pérez e Iñigo Muñoyerro

Sobre el autor


marzo 2008
MTWTFSS
     12
3456789
10111213141516
17181920212223
24252627282930
31