No es nada fácil diseñar un automóvil. ¿Os acordáis cuando Homer intenta crear el coche más bonito del mundo en la fábrica de su hermanastro y la manda a la quiebra? Quizá por eso las marcas renuevan sus modelos más exitosos una y otra vez. Cuando ya no sirven esas pequeñas evoluciones, lanzan lo que llaman “una nueva generación”. Oye, y funciona. Se vuelven a vender otro montón de coches.
La verdad es que a todos nos gusta ver cómo van madurando estos engendros mecánicos a los que en ocasiones mimamos como un hijo. El más famoso, sin duda, es el Golf. Desde su aparición en 1974, el pueblo nuevo coche del pueblo, para los alemanes, claro, porque con los sueldos españoles había que pensárselo más de dos veces antes de comprarlo.
Todavía recuerdo el que tenía mi tío, cuando yo era un solo un crío. Era precioso, diferente a los demás vehículos de la época. Ahora, entiendo que lo que nos llamaba la atención era el portón trasero (lo que llaman un hatchback). Hoy nos parece normal que los coches sean de tres o cinco puertas, pero en 1974…
Fue el genial Giorgetto Giugiaro quien ideó el sistema hatchback, también quien diseño el Golf o Volkswagen Rabbit, su nombre en EE UU. ¿Recordáis el de ‘Remington Steele’? Laura Holt conducía uno precioso en el que se podía leer la placa Rabbit. Era descapotable, de techo blando negro y carrocería blanca. La verdad es que el Golf Cabriolet nada tenía que ver con Giugiaro, los fabricaba el carrocero Karmann a partir de 1979, y precisamente eliminaba el novedoso acceso al maletero.
En 1983, llegó su primer hermanito. Era más largo,
Con los noventa desaparecieron los ojos, se aumentó el número de motorizaciones y el Golf dejó de tener ese encanto romántico. Era un cochazo, seguro, potente, cómodo y bastante económico. Encima es bonito, pero ya no fue lo mismo. Aguantó 8 años, de
El Golf IV lo sustituyeron en 2003, ya en 2005 apareció el Golf Plus, un intento de convertir al mito de las carreteras en ¿monovolumen enano?
Y tres años después se volvió a cambiar. Si las dos primeras generaciones habían visto nacer a su lado clones cabrio, sedan (el Jetta) e incluso les había salido culo en el acabado Variant, fue de manera natural. Parecía como si la casa de Wolfsburgo tratara de forzar algo.
El año pasado se presentó la sexta generación. ¿Cuánto tiempo le queda?