No sé a vosotros, pero a mí el Namir me ha dejado con ganas de ver más deportivos eléctricos. Éste, que tampoco se fabrica aún, sí puede que lleguemos a verlo en las carreteras. En unos tres años, según los rumores. Bonito es un rato, pero eso no hacía falta decirlo. Potente, también: 313 CV, con un par de 450 Nm. Casi nada.
Pero más llamativo que lo que tiene es lo que no tiene. Retrovisores, por ejemplo. Olvídate de los espejos exteriores. Al E-Tron no le hacen falta, unas cámaras y unas pantallas interiores los sustituyen. Por cierto, que esta tecnología podría empezar a usarse de inmediato.
Los faros antinieblas son otro de los elementos que Audi borra en este concept car enchufable. 8 horas en una toma de corriente casera son suficientes para que recupere sus 250 kilómetros de autonomía. Gracias a unos diodos luminosos que se adaptan a la climatología y a la cartografía, las luces simulan el funcionamiento de los antinieblas, pero con muchísimo menos consumo de energía.
Y es que el vehículo, parecido al de Yo Robot ¿verdad?, es capaz de leer las incidencias de la vía. Para ello utiliza el navegador MMI con una conexión a Internet que le permite conocer lo que se va a encontrar y recalcular una ruta. No es ciencia ficción, desde la semana que viene el A8 que ahora está en los concesionarios montará opcionalmente estas funciones basadas en Google Earth.
Para los que os preguntáis cuánto corre, el E-Tron no pasa de los 200 km/h. Para compensar, alcanza los 100 en 4,8 segundos y recupera de 60 a 120 km/h en 4,1. Todo un lujo para una conducción limpia, segura y sobre todo silenciosa