La gasolina ya vale más que el gasoil. ¿Deberíamos alegrarnos? No se vosotros, pero a mi poco me importa cual de los dos carburantes es más caro. La verdad es que los dos siguen estando por las nubes. Vale, es cierto que hace poco todavía era más prohibitivo llenar el depósito, pero que no me vengan con celebraciones.

La razón por la que el diésel han vuelto a la histórica normalidad de costar menos, viene dada por que la gasolina ha subido, la semana pasada un 1,02%. Mucho ojito chicos. El petróleo alcanzó sus máximos en julio de 2008. Todos recordamos el tono alarmista en los noticieros: ¡El oro negro se agota!, parecían decir. Pero no. Desde entonces no ha dejado de bajar, al hacerlo también la demanda por la temidísima crisis (uyyy que miedo).

La verdad es que desde primeros de año, el consumo de petróleo se está recuperando. Ya sabeís la que se nos viene encima, ¿verdad? Consolémonos: comparando los precios actuales con los de los máximos de julio la caída de precios es del 30,25 para la gasolina y el 34,31% para el gasóleo.