>

Blogs

Fermín Apezteguia

Pasamos consulta

La enfermedad no es motivo de vergüenza

La enfermedad no es motivo de vergüenza | Pasamos consulta - Blog elcorreo.com

La incontinencia urinaria es un problema de salud serio. No sólo por su alta incidencia -ya sé que a los médicos les gusta más hablar de prevalencia- sino porque afecta profundamente a la autoestima de quien la padece. Son muchas personas. En España se calcula que una de cada cuatro mujeres y siete de cada cinco varones. Cuanto más edad, más casos, claro, pero llama la atención que a partir de los 40 años comience a verse apurado por unas ganas irrefrenables de orinar una de cada veinte personas. A la vista del alcance de esta complicación, la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física ha decidido analizar la cuestión en profundidad en el congreso nacional que celebra estos días en Toledo.

“No es una de esas enfermedades con una alta mortalidad asociada, pero sí tiene un importante impacto en el día a día, hasta el punto de que modifica estilos de vida de muchos de los afectados y supone altos costes directos e indirectos. Lo dice Lourdes Fraguas, médica rehabilitadora del hospital de Guadalajara, que participa en el encuentro. Hace unos años, conocí a una mujer, Inmaculada de la Campa, fundadora de la Asociación de Pacientes con Pérdidas de Orina y Urgencia Miccional (APPO), que lo relataba así: “Ha habido veces que he tenido miedo a salir de casa. Son como brotes. No quieres ni salir a hacer la compra porque sabes que no hay un baño en el supermercado. Lo he pasado realmente mal”. Aún sigue al frente de esta organización, así que si alguien quiere ponerse en contacto con ella, puede hacerlo pinchando aquí.

Según han puesto de manifiesto los especialistas reunidos en Toledo, es frecuente que con el problema de incontinencia urinaria aparezcan otros que complican aún más la existencia. Por ejemplo, alteración del suelo pélvico en las mujeres, incontinencia fecal, disfunciones sexuales. Por fortuna existen tratamientos, que comienzan con la rehabilitación y pueden continuar, si es el caso, con medicación, cada vez más eficaz, y cirugía. El primer ejercicio básico recomendado consiste, en contraer el anillo muscular del ano y la uretra para relajarlo a continuación, hasta un máximo de ocho o diez veces por sesión. Hay otros, que cualquier especialista, un ginecólogo, un urólogo o un experto en rehabilitación, podrían explicarle, adaptados a la situación de cada paciente. Lo mejor en estos casos es superar el pudor y sentarse frente al experto a hablar del asunto sin miedo. La enfermedad nunca puede ser motivo de vergüenza. Una de cada cinco personas son muchas. Y, si no, mire a su alrededor.

La salud al alcance de cualquiera

Sobre el autor

Categorías

Buscar


junio 2011
MTWTFSS
  12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
27282930